Estructuración de la personalidad desde el psicoanálisis
Al
momento de hablar de personalidad en si enfocada desde el psicoanálisis debemos
comprender que la psicología parte del supuesto que el sujeto, yo,
personalidad, persona o individuo son términos que dan cuenta del pensamiento,
pues existe una estrecha relación entre hablar, pensar y comportarse. Por ello
el psicoanálisis trabaja y formaliza el concepto de sujeto encontrando
diferencias fundamentales entre este, el yo o el individuo que se puede
estudiar de manera divisoria. (Patricia, Jaramillo, Sujeto, & Lazo, 2011) Por otra parte
recordemos que el estudio de la personalidad se origina en la práctica médica,
a partir de enfermedades, síntomas, de no clara explicación fisiológica, por
tanto, siempre habrá referencia a un fallo en el desarrollo o funcionamiento de
la personalidad. (Fernández, n.d.)
Para
Freud, referente principal del psicoanálisis la mente constaba de procesos
divergentes y contradictorios que daban lugar a conflictos, que a su vez por un
proceso natural de síntesis producía síntomas, rasgos del carácter o sueños,
como formaciones que significan una transacción entre esas múltiples tendencias,
dicho esto se comprende que la psique humana se encuentra conformada por un
sinnúmero de factores que generaran rasgos del carácter en el ser humano como
factor configurador de la personalidad en sí, donde la personalidad se da en
términos estructurales y no como atributos, cualidades modificables o
adaptables y consistentes, referidas a emociones, comportamiento y percepción
de sí y de los otros en el tiempo, en lo que Freud formula su explicación de lo
psíquico, descompuesto en ello, yo y súper yo, instancias psíquicas de la
estructura no unificada (Díaz Benjuma María, 2002; Patricia et al., 2011)
Según
(Nostas, Carla; Lora, 2002), Freud al
construir el “aparato psíquico” realizó un descentramiento necesario respecto
de la conciencia. El “yo” que es el sujeto de la conciencia para Freud es una
de las partes, una instancia de ese conjunto estructurado que es el aparato
psíquico. Y el “sujeto del inconsciente” que es el sujeto del sistema del
inconsciente es asimismo otra instancia del aparato psíquico, aspectos que nos
permitirán relacionar con el entorno y a su vez mantener una eterna disyuntiva
con nuestro inconsciente oscuro del cual buscamos defendernos.(Díaz Benjuma María, 2002)
En
definitiva, el organismo humano es un complejo energético donde el instinto es
la representación psicológica de una fuente de excitación somática que impulsan
y dan dirección a la personalidad, motivan la conducta, son su fuente de
energía. Lo característico aquí es el desplazamiento de energía de un objeto a
otro, la variación del objeto de satisfacción durante la vida, lo cual explica
la versatilidad y la plasticidad de la personalidad. La distribución de la
energía psíquica por los tres subsistemas de la personalidad es lo que
caracteriza su dinámica, estos compiten e interactúan en función de la energía.
Los instintos son de vida o libido o de muerte o destrucción. En esta
naturaleza contradictoria de lo consciente e inconsciente radica el dinamismo
de la personalidad, que en busca del equilibrio de fuerzas contradictorias
desarrolla los mecanismos de defensa del yo, los cuales logran reducir la
ansiedad generada por conflictos y tensiones a través del autoengaño y la
distorsión de la realidad que alivian la ansiedad. (Fernández, n.d.)
Bibliografía
Díaz Benjuma María. (2002). Psicoanálisis Y Psicología
De La Personalidad. Perspectivas Para La Integración. Escuela Abierta, 5,
197–209.
Fernández, L. (n.d.). Tendencias históricas y contemporáneas :
ruptura, confluencia y continuidad
.
Nostas, Carla; Lora, M. (2002). El Estatuto Del Cuerpo En
Psicoanálisis. I.
Patricia, G., Jaramillo, P., Sujeto, E. L., & Lazo, Y. E.
L. (2011). El Sujeto Y El Lazo Social En El Psicoanalisis.
No hay comentarios:
Publicar un comentario